






De vuelta a la normalidad(en este exilio para el triatlón que es La Rioja)después del sueño vivido durante cinco días en Lanzarote,empieza uno a pensar y sacar conclusiones.Y la mía está clara, estoy feliz y satisfecho.El calor sabía que me pasaría factura y así fue,con el tiempo que hemos tenido por aquí(entrenando con la ropa de invierno hasta el domingo anterior)la aclimatación en tres días era imposible.Con todo esto la estrategia estaba clara,tranquilidad,tranquilidad y más tranquilidad.
La salida por dentro junto a la corchera,con algunos manotazos y patadas voy haciendo camino,sin forzar nada termino en 1h04´45´´ y comienzo con la bici,lo mismo adelanto que otros me adelantan a mi y la verdad me hacen dudar del ritmo que llevo.Me bajo de la bici en 6h02´44´´ y empiezo los 42km con buen paso,pero esto no dura mucho y empiezo a bajar el ritmo,me hormiguean las manos y tengo muy malas sensaciones, pero me encuentro con Jaime y me dice que tome hielo en el próximo avituallamiento y me lo ponga en las muñecas y la nuca,le hago caso y funciona(muchas gracias Jaime),subo un poco y me presento en meta con un tiempo de 3h59´37´´ y un total de 11h18´05´´.Como he dicho contento y satisfecho.

